Ya sé, soy muy poco original con los títulos pero es que no encontré uno mejor.

Hace 11 años salí bachiller. Han pasado muchas cosas desde entonces, pero de alguna forma aún siento que me estanqué. Y sí lo hice, por varios años, por diversas razones y pensar en ello aún me atormenta...

No sé si algún día eso cambie, debo ser optimista y pensar que si, porque sé que puede cambiar, pero la pregunta es, ¿yo haré que eso cambie?

Si, he aprendido muchas cosas en estos años, pequeñas cosas que en realidad parecen no ser nada porque ahí las dejé, siendo sólo momentos que puede que regresen.

Aprendí matemáticas, física y química, incluso álgebra que hasta ahora no me ha servido más que para decir que logré entrar a la facultad de ingeniería, que recibí un libro de química como premio por sacar la máxima nota en un examen y dar un par de clases particulares a una vecina. Ah y para poder entrar por examen de aptitud a la carrera de informática, casi lo olvido.

Aprendí lenguaje redacción, estadística, historia y economía. Pretendía ser escritora, quizá tener una columna en algún periódico, apenas soñaba con algún día aparecer en la televisión o en la radio. Pero sólo me quedó la experiencia de haber estudiado periodismo por un año.

Después... Sólo me dejé ir, viviendo día a día, aprendiendo, tropezando, aferrándome a un mundo virtual que sabía que sólo era un momento más y que con el pasó de los años también desapareció al igual que los amigos que hice.

Después de varios años pensé que había encontrado algo que sería perfecto para mi, Gastronomía. El entusiasmo para ser sincera me duró poco y de forma intermitente. Hace dos años tendría que haberme graduado pero de nuevo y por diversas razones lo dejé estar.

Después de 11 años un amigo del colegio me pregunta qué aprendí y me doy cuenta que no puedo presumir de nada. Sí, he aprendido muchas cosas pero no las sé con experiencia...

En mi carrera he aprendido a cocinar desde chocotejas hasta comida china, pero hasta ahora no he podido aplicar nada de lo aprendido ni practicar... Y tampoco es que justamente ahora me apasione la idea de hacerlo. Si, aún me gusta cocinar, pero no me resulta tan gratificante como quisiera...

Ahora estoy aprendiendo a hacer bisutería y quisiera aprender a hacer manualidades, pero sólo como pasatiempo. No sé realmente qué es lo que haré en el futuro, tengo tantos planes con mi novio pero de alguna forma siento que son lejanos...

Como sea, me faltan apenas unos meses para terminar mi carrera. La terminaré y por lo menos podré cerrar esa etapa y comenzar una nueva. Y después... A ver qué.

Si, dejé algo (muy) olvidado éste blog... Bueno, sin duda han pasado muchas cosas en todo éste tiempo. Pero el significado de la última entrada no ha cambiado, si no que ha ido evolucionando cada vez más. Ese será el tema de otra entrada.

Por lo pronto... Sólo vine a presumir la entrada para el concierto de Pxndx éste 11 de septiembre *^*

Hace muchos años que empecé a escucharlos, si mal no recuerdo la primera  canción que escuché de ellos fue Cita en el quirófano, allá por el 2005. Después compré el disco Para ti con desprecio y luego Amantes sunt amentes. Me encantaron y por supuesto, aún estaba en aquella difícil etapa adolescente de desamores.

Aún seguía escuchando sus canciones, sin llegar a ser una fan desesperada. Desgraciadamente cuando vinieron allá por el 2009 no pude ir a los conciertos que dieron, y cosa rara, andaba pensando en que ojalá volvieran cuando escuché el comercial del concierto en la televisión.

Me sentí emocionada y también nerviosa, pensando en si ésta vez podría ir. Pero ahora es un hecho, con fila o sin ella, ya tengo mi entrada y ando esperando ansiosa a que ya llegue el día. Es el segundo concierto al que voy en mi vida, al menos que recuerde. El primero fue hace casi 15 años atrás, en el mismo escenario.

Sé que será un día memorable y lo disfrutaré al máximo.

Podría decir que no sé cuándo o cómo se originó, pero sí que lo sé y al pensarlo... me siento un poco confundida. De alguna forma, siempre pensé que sería así, por esa razón: por alguien más.

¿Por qué no por mi misma? Seguramente, eso se preguntarán muchos y yo también me lo pregunté. Y es que, por mi misma no tenía una motivación para cambiar, ni siquiera para seguir adelante, no habían razones por las que luchar y ser mejor. Ya pasó la etapa en la que yo me sentía llena con mis propios éxitos, en la que me sentía bien al hacer sentir orgullosa a mi madre, todo eso pasó a significar nada para mi, porque al final de ese camino estaba sola. Y no había más, no veía un futuro, tal vez uno, pero estaba tan vacío...

Ahora quiero hacer muchas cosas, quiero trabajar y forjar una vida, quiero ser mejor y aprender muchas cosas. Quiero cambiar, quiero hacer feliz y quiero ser feliz. Quiero tener mi propia historia, pero una historia que no sea solo mía, sino junto a la persona que amo y por ello es que estoy dispuesta a luchar y hacer los sacrificios que sean necesarios. Es difícil, claro que lo es y hay días en los que estoy a punto de claudicar, pero no hay día en el que no aprenda algo nuevo, en el que no halle más razones para seguir, incluso por mi misma. Porque aunque esa persona no sea parte de esa historia con la que sueño, quiero estar preparada para vivirla cuando se presente la oportunidad. No quiero desaprovechar más cada día y cada oportunidad que se me presenta.

Así que desde ahora, si tengo un ideal. El saber que aún deben pasar años antes de alcanzar mi meta, que queda aún mucho, muchísimo trabajo que hacer y que debo esperar, cuando nunca me ha gustado hacerlo... Eso también me hace dudar, pero quiero seguir encontrando la fortaleza en cada pequeño sueño que tengo despierta, en cada palabra que me hace feliz y me anima tanto a seguir y no rendirme.
Quiero formar una empresa, quiero tener un patrimonio. Quiero formar mi hogar, una casa, una familia.

Hace menos de medio año atrás no me imaginaba siquiera pensando hoy en estas cosas, en la idea de construir un futuro para mi y alguien más, el de tener tantos planes y anhelos por cumplir, en que hoy me preocuparía más por mi propia apariencia y quisiera probar tantas cosas que antes no se me habían pasado siquiera por la cabeza, que hoy tienen sentido porque lo tengo a él. Pero supongo que los cambios son así.