Estos días han sido algo extraños me parece, pero a la vez muy comunes para mí.
Estuve recordando muchas cosas, estuve nostálgica, quizá demasiado nostálgica y la verdad que aún estoy indecisa entre si esto es bueno o no.
Mi regreso al foro, aunque solo fue por unos dos días, fue el origen de todo esto. Odio sentirme así, porque e confunde, pero también me gusta porque tal vez no soy tan insensible después de todo. Así que se podría decir que esto me devuelve a una realidad pasada, muy vieja.
Mientras embalaba mis cosas para mi cercana mudanza me encontré de nuevo con escritos viejos, borradores viejos de mí paso por el colegio, la universidad y bueno, mis trabajos anteriores. No sé porque siempre me sorprende encontrarme con esos testimonios vivos de mi vida pasada y lo peor es que me gusta volver a leerlos una y otra vez, cosa que demora mi trabajo y termino en la noche sin haber embalado nada más que unos cuantos libros.
Y bueno, para ser sincera es que me sorprende el hecho de que en toda mi vida he cambiado constantemente. La niña que fui me parece una extraña que pensaba cosas macabras para su corta edad, demasiado malvada para mi gusto, además de haber sido una niña triste, depresiva y para colmo una tímida. La adolescente enamorada platónicamente de su primer novio también me parece extraña, ella pensó muchas veces en morir, en matarse porque no encontraba razón de vivir, al igual que la niña malvada, que también había pensado que morir era mejor que seguir viviendo el infierno que era su vida.
Bueno, ambas sobrevivieron, la última gracias a la primera claro está y dieron paso a la joven, ella era un tanto más centrada debido a todo lo que había vivido, pero aún no era la personalidad final de esta chica, así que vivió amargada, sola y orgullosa de sus logros intelectuales. Podría decirse que vivió mejor que las otras dos, ya que ella no había pensado en la muerte como las anteriores, al menos no con tanta frecuencia, más al contrario, encontró poco a poco el sentido de la vida, se fijó metas y sueños que deseó realizar pero aún era frágil y su vida le hacía tambalear en sus decisiones, no sabía por cual de sus metas optar, porqué camino ir si todos se mostraban igual de placenteros o ¿inútiles? Bueno, tomó decisiones y se arriesgo a equivocarse, obviamente pensó haberse equivocado y decidió por otra opción y luego otra y otra… pero a pesar de que todos pensaron que era una pérdida de tiempo ella lo había aprovechado para crecer, para disfrutar y vivir la vida que tantos años no había logrado vivir, que no había disfrutado.
Sin sospechar que esa solo había sido una parte de la vida se dejó llevar por la felicidad del momento y de nuevo cayó, y de nuevo cae, una y otra vez sin saber qué camino tomar, sin saber si lo que eligió es lo correcto y arriesgándose una vez más porque la filosofía de su vida ahora es disfrutar el momento, disfrutar el ahora, ser feliz y nada más, porque ella piensa que siendo feliz los que le rodean pueden serlo también, y eso es lo que le anima, ser útil de alguna u otra forma a los demás a los que ella aprecia, aunque no estén cerca, aunque no los conozca, aunque ellos no la quieran, porque ella siente en el fondo que eso no es tan importante porque cree que ella puede con su amor lo logrará todo y lo más gracioso del caso es que ama en silencio, sin interés, sin esperar nada a cambio más que lograr una sonrisa, una pequeña sonrisa de los que ella quiere. Talvez todo lo que vivió le ha enseñado lo que realmente importa en este mundo para ser feliz, o para vivir plenamente, pero también sabe que aún su vida no es plena. Sabe que le faltan aún muchas cosas por realizar, muchos sueños que cumplir y no lo sabe todo, no sabe mucho, quizá no sepa nada. Nada más que ser indiferente ante lo malo, lo tonto y lo feo. Quizá le falta mucho camino aún por recorrer, mucho que aprender y está consciente de ello. Pero al menos durante su vida y desde que había pensado en morir porque la vida no valía la pena ser vivida ha cambiado mucho, para bien o para mal el tiempo lo dirá, pero ha cambiado e intenta ser mejor persona y ayudar a los demás a su manera, aunque los demás no le entiendan y crean que esta loca o que es una estúpida.
Los recuerdos siguen allí sin embargo, para que los recuerde y para no volver a cometer los mismos errores si alguna vez lo hizo y aunque los cometa de nuevo será una vez más ocasión para aprender qué no debe hacerse, porque eso fue lo mejor que aprendió, lo que no debe hacerse.
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Temática Memorias de una loca